Sin lagrimas

 Un cuerpo que llora,

 ya sin lágrimas,

ante la bronca que lo doblega,

veneno que se apodera de las células,

matando los sentidos....

El deseo de no rendirse,

del que ya no lucha,

los vientos soplando en contra,

arrancado  la tinta de la sangre,

y la piel de las hojas...

Desatando las tormentas,

que lo azotan con sus mareas,

destruyendo el mascaron de proa,

haciéndolo encallar entre las rocas,

y el sentir,

estallando en el alma....

Su grito desesperado de silencios,

de huesos yertos que ya no cantan su canción,

por la aversión que los condenan,

en el destino que destiñe los colores,

y lo entrega al invierno interno,
donde los ojos no pueden distinguir la luz de la oscuridad.....

Los tendones desgarrando la verdad,
en el ensueño eterno de lo irreal,
corazón hecho añicos de cristal,
de el cuerpo ya sin lágrimas,
que quiere llorar.