Habían...

Habían días en que se quedaba así, como en una fotografía vieja, que sin decir nada, cantado las melodías olvidadas del alma, en su mirada profunda y perdida guardaba el recuerdo de los siglo, como jugando con el viento entre los arboles

Esos días eran como que intentaba extender sus manos, y abrazarlo. Y cualquier intento de sacarla de su lado era en vano, su alma no estaba allí con ella. Su cuerpo quedaba como olvidado, abandonado, mientras su corazón vagaba de una foto a otra, buscándolo, contándole, lo que su boca no decía, lo que sus manos torpemente escribían....

En esos días, que había tanto que decir, pero donde encontrar con quien hablar el idioma olvidado de las estrellas, era algo que difícilmente sucediera. Todos a su alrededor, corrían, ciertamente ni siquiera estaban allí. Para sus ojos eran como un montón de marionetas, de una película en cámara rápida y ella los miraba desde lo alto de su ventana, los miraba sin mirar, por que sus ojos en esos días se llenaban de mar...

En esos días ella estaba en su mundo, tan lejos de aquí, entre colores y el silencio, entre imágenes quietas y recuerdos. Allí en su mundo bajo el sol del un cálido abril, suspendida en su tiempo, lo encontraba entre versos, en la sangre que recorría su cuerpo....

En eso días no salia del calor de sus brazos, del sabor de sus besos, de las lineas que entre sus letras le acariciaron el cuerpo. Esos días eran solo para el y así se quedaba, con la mirada perdida dentro de su mirada, hasta llegar la noche cuando lo soñaba....